Alfondeguilla vive un gran día taurino
Autor: torodigital -
El pasado viernes 16 de agosto de 2024, la localidad de Alfondeguilla, en la provincia de Castellón, continuó celebrando sus fiestas patronales con un destacado evento taurino. La jornada comenzó a las 17:00 horas con un emocionante encierro y una prueba de vaquillas, protagonizada por ejemplares de la ganadería de Germán Vidal, que lograron entretener al público, aunque la dificultad para encerrar a uno de los animales provocó que la tarde se extendiera más de lo planeado. Posteriormente, el evento principal tuvo lugar con la entrada de un astado cerril de la ganadería de Domínguez Camacho, adquirido en la finca de Sergio Centelles. Este toro, de imponente figura y pelaje negro, saltó a la plaza con gran energía, desafiando al recortador que lo aguardaba. Brindó una lidia espectacular, caracterizada por sus rápidas arrancadas y su nobleza, antes de ser encerrado para la embolada nocturna. Durante la noche, el ejemplar mantuvo su energía, realizando buenos quiebros y rodadas. Al finalizar su lidia, se adentró en las calles del recinto, cerrando así un día taurino memorable en esta localidad de la Plana Baixa.
El pasado viernes 16 de agosto de 2024, la localidad de Alfondeguilla, en la provincia de Castellón, continuó celebrando sus fiestas patronales con un destacado evento taurino. La jornada comenzó a las 17:00 horas con un emocionante encierro y una prueba de vaquillas, protagonizada por ejemplares de la ganadería de Germán Vidal, que lograron entretener al público, aunque la dificultad para encerrar a uno de los animales provocó que la tarde se extendiera más de lo planeado. Posteriormente, el evento principal tuvo lugar con la entrada de un astado cerril de la ganadería de Domínguez Camacho, adquirido en la finca de Sergio Centelles. Este toro, de imponente figura y pelaje negro, saltó a la plaza con gran energía, desafiando al recortador que lo aguardaba. Brindó una lidia espectacular, caracterizada por sus rápidas arrancadas y su nobleza, antes de ser encerrado para la embolada nocturna. Durante la noche, el ejemplar mantuvo su energía, realizando buenos quiebros y rodadas. Al finalizar su lidia, se adentró en las calles del recinto, cerrando así un día taurino memorable en esta localidad de la Plana Baixa.
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