Els Festers de Benifairó 2025 exhiben un Adolfo Martín
Autor: torodigital -
Este jueves 11 de septiembre de 2025 prosiguieron las exhibiciones taurinas en la localidad valenciana de Benifairó de les Valls, en el marco de sus fiestas patronales. En esta ocasión, la organización corrió a cargo de Els Festers, quienes presentaron un ejemplar de la prestigiosa ganadería Adolfo Martín, conocida por la seriedad y el trapío de sus toros, así como por su encaste Albaserrada. El astado, de nombre Carpintero, marcado con el número 47 y guarismo 0, lucía un pelaje negro entrepelado, bien armado, cuajado y de impecables hechuras. Realizó una salida vibrante, eléctrica, haciendo hilo desde el primer momento hacia los recortadores que lo esperaban, dejando patente su movilidad y presencia.Sin embargo, tras los primeros compases, el toro se aquerenció en el asfalto, donde se mostró más reservado, falto de chispa en sus embestidas y sin terminar de romper en la lidia. A pesar de los intentos de los recortadores por mantener su atención, Carpintero se desentendió de los cites y emprendió su marcha por las calles del municipio, obligando a los organizadores a enlazarlo para su posterior embolada. La jornada concluyó con el toro resguardado para la tradicional embolada nocturna, en una tarde que, si bien no brilló por la bravura del ejemplar, sí dejó constancia del compromiso de Els Festers por elevar el nivel de las fiestas con ganaderías de renombre como la de Adolfo Martín.
Este jueves 11 de septiembre de 2025 prosiguieron las exhibiciones taurinas en la localidad valenciana de Benifairó de les Valls, en el marco de sus fiestas patronales. En esta ocasión, la organización corrió a cargo de Els Festers, quienes presentaron un ejemplar de la prestigiosa ganadería Adolfo Martín, conocida por la seriedad y el trapío de sus toros, así como por su encaste Albaserrada. El astado, de nombre Carpintero, marcado con el número 47 y guarismo 0, lucía un pelaje negro entrepelado, bien armado, cuajado y de impecables hechuras. Realizó una salida vibrante, eléctrica, haciendo hilo desde el primer momento hacia los recortadores que lo esperaban, dejando patente su movilidad y presencia.Sin embargo, tras los primeros compases, el toro se aquerenció en el asfalto, donde se mostró más reservado, falto de chispa en sus embestidas y sin terminar de romper en la lidia. A pesar de los intentos de los recortadores por mantener su atención, Carpintero se desentendió de los cites y emprendió su marcha por las calles del municipio, obligando a los organizadores a enlazarlo para su posterior embolada. La jornada concluyó con el toro resguardado para la tradicional embolada nocturna, en una tarde que, si bien no brilló por la bravura del ejemplar, sí dejó constancia del compromiso de Els Festers por elevar el nivel de las fiestas con ganaderías de renombre como la de Adolfo Martín.
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