Dos astados de poder cierran las fiestas de San Joaquín con bravura y aplausos
Autor: torodigital -
El sábado 30 de agosto de 2025 marcó el final de las fiestas taurinas en la barriada de San Joaquín, en La Vilavella. La comisión de fiestas, en un gesto magistral, seleccionó dos astados de renombradas ganaderías para clausurar la última tarde. El primero en saltar al albero fue un impresionante ejemplar de José Luis Pereda, un toro astifino y de capa colorada que deslumbró desde el primer instante. Con un ímpetu inusual, el toro se lanzó a los recortes con una fijeza envidiable, demostrando destellos de bravura en cada arrancada. Su recorrido por el amplio recinto fue una exhibición de velocidad y sentido, dejando a más de un aficionado con el corazón en vilo. Su comportamiento fue notable, y al ser encerrado, el público respondió con una ovación cerrada, reconociendo no solo la bravura del animal, sino también la calidad de su lidia.

El sábado 30 de agosto de 2025 marcó el final de las fiestas taurinas en la barriada de San Joaquín, en La Vilavella. La comisión de fiestas, en un gesto magistral, seleccionó dos astados de renombradas ganaderías para clausurar la última tarde. El primero en saltar al albero fue un impresionante ejemplar de José Luis Pereda, un toro astifino y de capa colorada que deslumbró desde el primer instante. Con un ímpetu inusual, el toro se lanzó a los recortes con una fijeza envidiable, demostrando destellos de bravura en cada arrancada. Su recorrido por el amplio recinto fue una exhibición de velocidad y sentido, dejando a más de un aficionado con el corazón en vilo. Su comportamiento fue notable, y al ser encerrado, el público respondió con una ovación cerrada, reconociendo no solo la bravura del animal, sino también la calidad de su lidia.