Una cogida marca la jornada del viernes en el Barrio Carbonaire en La Vall d’Uixó
Autor: torodigital -
El viernes 18 de octubre de 2024 continuaron las festividades taurinas en el barrio Carbonaire de La Vall d’Uixó. En esta ocasión, la Peña Jose Luis Arribas y la A.C.T. Peña “Victorino” presentaron dos astados de distintas ganaderías. El primero en salir fue un ejemplar de la ganadería de Román Sorando que, aunque bien formado y con buena presencia, tuvo una salida poco espectacular y se limitó a recorrer las calles del recinto. Se mantuvo en la parte baja, donde interactuó con el terreno arenoso, realizando quiebros y rodadas sin mucha intensidad hasta que fue finalmente enlazado. Posteriormente, se liberó un toro de la ganadería de Juan Albarrán, que rápidamente se dirigió hacia el recortador, quien lo detuvo hábilmente con el capote. El animal, tras un breve recorrido por las calles, regresó al punto de partida, donde un aficionado fue cogido entre los barrotes y tuvo que ser trasladado a la enfermería móvil. La lidia del morlaco de Albarrán continuó, mostrando un comportamiento más activo y con sentido, mientras el burel respondía a los cites y se mantenía alerta ante los barrotes, en una tarde que atrajo a una buena afición en la localidad de La Plana Baixa.
El viernes 18 de octubre de 2024 continuaron las festividades taurinas en el barrio Carbonaire de La Vall d’Uixó. En esta ocasión, la Peña Jose Luis Arribas y la A.C.T. Peña “Victorino” presentaron dos astados de distintas ganaderías. El primero en salir fue un ejemplar de la ganadería de Román Sorando que, aunque bien formado y con buena presencia, tuvo una salida poco espectacular y se limitó a recorrer las calles del recinto. Se mantuvo en la parte baja, donde interactuó con el terreno arenoso, realizando quiebros y rodadas sin mucha intensidad hasta que fue finalmente enlazado. Posteriormente, se liberó un toro de la ganadería de Juan Albarrán, que rápidamente se dirigió hacia el recortador, quien lo detuvo hábilmente con el capote. El animal, tras un breve recorrido por las calles, regresó al punto de partida, donde un aficionado fue cogido entre los barrotes y tuvo que ser trasladado a la enfermería móvil. La lidia del morlaco de Albarrán continuó, mostrando un comportamiento más activo y con sentido, mientras el burel respondía a los cites y se mantenía alerta ante los barrotes, en una tarde que atrajo a una buena afición en la localidad de La Plana Baixa.
Dos cogidas sobresaltan la tarde en Almenara