Els Ibarsos arrancan sus fiestas patronales
Autor: torodigital -
El segundo fin de semana de mayo y en honor a la Virgen de los Desamparados, el núcleo de población de Sierra Engarcerán celebra sus fiestas patronales. Este sábado día 11 de mayo del 2024 fueron numerosos los aficionados que se desplazaron a estas tierras de la Plana Alta atraídos por un buen cartel. La tarde arrancó con la participación del ganadero Vicente Benavent, de Quatretonda (València) en el concurso de ganaderías. Buenas sensaciones trasmitieron los animales de Benavent que se lucieron en la coqueta plaza, destacando la vaquilla número 66 que rozó la perfección en su actuación, siendo ovacionada al ser encerrada. A continuación, la Peña Taurina patrocinó el toro cerril de la tarde que pertenecía al hierro de Sergio Centelles Badal. Morlaco cuajado, bien presentado y con poderío, de nombre “Esturión” n.º 7 y guarismo 0. Tras una salida despistada, tuvo una lidia corta pero intensa que aprovecharon los recortadores confiados de la nobleza del ejemplar que fue encerrado sin dificultades para la embolada de la noche.
El segundo fin de semana de mayo y en honor a la Virgen de los Desamparados, el núcleo de población de Sierra Engarcerán celebra sus fiestas patronales. Este sábado día 11 de mayo del 2024 fueron numerosos los aficionados que se desplazaron a estas tierras de la Plana Alta atraídos por un buen cartel. La tarde arrancó con la participación del ganadero Vicente Benavent, de Quatretonda (València) en el concurso de ganaderías. Buenas sensaciones trasmitieron los animales de Benavent que se lucieron en la coqueta plaza, destacando la vaquilla número 66 que rozó la perfección en su actuación, siendo ovacionada al ser encerrada. A continuación, la Peña Taurina patrocinó el toro cerril de la tarde que pertenecía al hierro de Sergio Centelles Badal. Morlaco cuajado, bien presentado y con poderío, de nombre “Esturión” n.º 7 y guarismo 0. Tras una salida despistada, tuvo una lidia corta pero intensa que aprovecharon los recortadores confiados de la nobleza del ejemplar que fue encerrado sin dificultades para la embolada de la noche.