Revista la Puntilla del 24 de Septiembre al 8 de Octubre de 2013 - N.º 141

Autor: LA PUNTILLA
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Editorial // La I.L.P., más vale tarde que nunca // Dicen que la gente solamente se acuerda de Santa Bárbara cuando llueve y algo así nos ha pasado a los taurinos, que solamente nos hemos dado cuenta de los desprotegida que estaba nuestra fiesta cuando los antitaurinos nos ganaron la primera batalla.
Nadie pensaba que algo tan arraigado como nuestra fiesta pudiera llegar a estar cuestionado e incluso prohibido en alguna parte de nuestro país, pero así ha sido y hasta los más optimistas tuvieron poner los pies en el suelo. Afortunadamente un grupo de apasionados emprendieron una labor de un mérito incuestionable y lograron recoger las firmas necesarias para que esta semana se debata y confiamos en que se apruebe una ley que de protección a nuestra fiesta como el bien cultural que es. Va por ellos mi reconocimiento y gratitud. La tramitación de esta ley ha dado ya sus primeros frutos, antes de llegar al propio debate, en forma de mociones que han presentado diversos partidos.
La noticia más grata es que junto al Partido Popular, que siempre ha defendido esta iniciativa, se ha
p o s i c i o n a d o UPyD en una demostración de madurez política que le honra. Este grupo pretende que los festejos taurinos y la tauromaquia en general estén protegidos como patrimonio cultural inmaterial español en los términos reconocidos por la Unesco, de modo no puedan ser suprimidos por las comunidades autónomas. Consideran que según la Constitución es el Estado quien tiene competencia exclusiva de la defensa del patrimonio cultural español. También aboga por proteger la tauromaquia en todo el país, realizando un registro nacional del patrimonio cultural español, que incluya los festejos taurinos, para adoptar las correspondientes medidas de identificación, documentación, investigación y puesta en valor. Naturalmente, como era de esperar, Izquierda Plural, ERC y Compromis-Equo argumentan en sus enmiendas contra la pretendida declaración de la fiesta de los toros como Bien de Interés Cultural y rechazan la tauromaquia como fiesta autorizada. Consideran las corridas de toros como “espectáculos violentos en los que se llevan a cabo torturas a animales”, pretenden que se prohíba el acceso de los menores a los recintos taurinos, que “se eliminen las partidas de dinero público para sostener espectáculos de maltrato animal”, y la supresión de las retransmisiones de corridas en medios audiovisuales. Por su parte CIU considera que la regulación de las corridas y otros espectáculos con toros corresponde a las comunidades autónomas y no al Estado. La ILP, al margen de la postura que adopten el resto de partidos, saldrá adelante y eso es bueno para la fiesta, pero no nos equivoquemos pensando que esto va a ser la panacea que resuelva los problemas del mundo del toro. Ni a corto ni a medio plazo volverán a abrir sus puertas las plazas que ahora mismo están cerradas. El mundo del toro se durmió en sus laureles y costará recuperar el terreno perdido, pero al menos esperemos que este “blindaje” evite en lo posible nuevos desmanes hacia un espectáculo que no pasa por su mejor momento.